La pandemia ha cambiado la forma en que se desenvuelve el ser humano y el mundo en su totalidad, las alteraciones de nuestra forma de vida y de la manera en que percibimos la realidad nos lleva a preguntarnos cuál será la realidad que heredemos una vez superada la crisis sanitaria. Predicciones en respuesta existen muchas y versan sobre distintas materias, desde salud mental, educación, costumbres hasta empleo formal e informal.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que 546,428 mujeres se sumaron al mercado laboral en el quinto mes del año, lo que compensó la salida de 490,125 hombres y llevó el balance de creación de empleo reportado para mayo a 56,303 plazas.
En los últimos tres meses del año la ocupación femenina ha mostrado mejor ritmo de avance que el del empleo masculino. De esta manera, el 63% de los casi 2 millones de trabajos recuperados en lo que va del 2021 corresponde a plazas ocupadas por mujeres.

¿Cuáles fueron las razones de esta mejora?
Según especialistas, existen dos fuertes motivos por los cuales se está mostrando una gran recuperación del empleo femenino.
En primer lugar, la crisis sanitaria afectó en mayor medida a los empleos de mujeres durante el año 2020. En este sentido, la salida del mercado de trabajo llevó la tasa de participación económica de las mujeres a su nivel más bajo en 15 años. Esto tiene su razón de ser, en general, las mujeres ocupan mayormente los puestos de trabajo que se consideran no esenciales, sumado a que en comparación ganan menor salario que los hombres demostrando que en la economía familiar se prioriza la empleabilidad del varón. Asimismo, colaboró contextualmente la salida de las escuelas de los hijos, llevando a muchas mujeres a la decisión de ocuparse de las labores en casa.
En segundo lugar, dado que la reactivación se haya vinculada al sector servicios, donde se emplea mayormente a mujeres, y en tanto fue uno de los sectores con mayor afectación por el Covid, la vuelta a las actividades de las diversas actividades no esenciales explica la incorporación de mujeres en el ámbito laboral.
Necesidades urgentes del mercado laboral femenino
– Creación del sistema universal de cuidados, para que tanto trabajadoras informales como formales cuenten con un sistema que colabore a su reincorporación en el mercado laboral.
– Licencias de paternidad, a fin de que las tareas de cuidados dentro del hogar puedan ser repartidas entre todos los integrantes de la familia.
La reducción de la desigualdad entre hombres y mujeres depende esencialmente de las políticas públicas que impulsen un lugar destacado a la incorporación de las mujeres en el ámbito laboral.